HOY QUIERO REFUGIARME
Hoy quiero refugiarme en el lado colorido de mi alma, en la alegría de ese instante eterno, en el brillo del sol, en una noche de estrellas, en la luz de la luna, o en claro azul del mar.
Hoy quiero refugiarme en las calles llenas de niños jugando en las veredas, en la risa contagiosa de quien con humor continúa el trayecto.
Hoy quiero refugiarme en aquellas veladas en familia, en los tiempos de playa, en las rondas de amigos, en el aire perfumado por la algarabía.
Hoy quiero refugiarme en el brillo de la esperanza esparcida en cada ola que llega a la orilla, en la espuma blanca que salpica entre las rocas.
Hoy quiero refugiarme en el beso de mi madre, en la mirada trasparente y fraterna de mi padre, en la mano sincera de mi tío, en amor de mis hijos y de mi compañero de ruta.
Hoy quiero refugiarme en mis amigos en los que siempre están aún cuando las papas queman.
Hoy quiero refugiarme en la belleza de la naturaleza que no deja de maravillar en su esmerado trabajo día a día.
Hoy quiero refugiarme en el trinar de las aves que en cada amanecer o atardecer dejan lo mejor de sí para contagiar su entusiasmo.
Hoy quiero refugiarme en lo mejor de ti y de mí, porque seguramente es allí donde habitan las respuestas.
Andrea Calvete
Hoy quiero refugiarme en las calles llenas de niños jugando en las veredas, en la risa contagiosa de quien con humor continúa el trayecto.
Hoy quiero refugiarme en aquellas veladas en familia, en los tiempos de playa, en las rondas de amigos, en el aire perfumado por la algarabía.
Hoy quiero refugiarme en el brillo de la esperanza esparcida en cada ola que llega a la orilla, en la espuma blanca que salpica entre las rocas.
Hoy quiero refugiarme en el beso de mi madre, en la mirada trasparente y fraterna de mi padre, en la mano sincera de mi tío, en amor de mis hijos y de mi compañero de ruta.
Hoy quiero refugiarme en mis amigos en los que siempre están aún cuando las papas queman.
Hoy quiero refugiarme en la belleza de la naturaleza que no deja de maravillar en su esmerado trabajo día a día.
Hoy quiero refugiarme en el trinar de las aves que en cada amanecer o atardecer dejan lo mejor de sí para contagiar su entusiasmo.
Hoy quiero refugiarme en lo mejor de ti y de mí, porque seguramente es allí donde habitan las respuestas.
Andrea Calvete