A MEDIA MÁQUINA

Al comenzar el día se prenden los motores, se calienta y se pone en funcionamiento la máquina, pero el cuerpo algunos días pesa toneladas y no quiere arrancar. ¿Por qué le cuesta tanto arrancar?, ¿Acaso el paso de los años pesa?, ¿los problemas o preocupaciones se cuelgan?, ¿o no hemos calentado lo suficiente? Interrogantes válidas a la hora de dar comienzo a una jornada. ¡Cuántos días quisiéramos vivir en sintonía con lo que nos circunda!, pero el engranaje se vuelve torpe y parece desfasarse de lo que ocurre a nuestro alrededor, y es como si camináramos a destiempo. ¿Por qué algunos días no podemos acompañar a la realidad que nos rodea? Porque nos levantamos con un mal día, porque nos duele mucho la cabeza, porque no dejamos de pensar en ese problema que no podemos solucionar, o porque sabemos que nos espera una semana en la que quizás no podamos cumplir ni con la mitad de lo que tenemos pensado… mil y una razones pueden contestar esta pregunta que se para al comienzo de ese dí...