A LA ESPERA
Cada instante que vivimos es parte de la espera, esperamos un cambio, un desenlace, una oportunidad, un desafío, un momento, ese quizás que ilusiona nuestros días y nos da fuerzas cuando flaquean. La espera requiere de calma, de inspirar profundo y exhalar detenidamente, hasta que el tiempo se convierta en esa línea presente en el que ocurren las situaciones. Pero como no todo sucede como lo previmos o imaginamos los conflictos se instalan en nuestro diario transitar. Es una costumbre muy humana querernos anticipar para resolver, y tomar cartas en el asunto lo antes posible, pero aquí se trata de ir viendo día a día, “golpe a golpe, verso a verso” La espera algunas veces se entremezcla con el milagro de que algo suceda, con esa plegaria elevada para que sea posible aún lo que lejos está de cumplirse. Sin embargo, la ilusión es un color que ilumina la espera, en el que se abre la puerta al quizás y también a la aceptación. Lo que vendrá después depende de nosotros de lo que hagamos con ...