TIPS INFALIBLES
Pero la vida no es un problema matemático con una única
solución. No es una receta donde cada ingrediente nos garantice el resultado
perfecto. La vida es un constante ensayo y error, un ir y venir entre aciertos
y equivocaciones, una búsqueda que nunca termina porque cada día nos enfrenta
con nuevas preguntas, con nuevos desafíos, con nuevas versiones de nosotros
mismos.
Nos llenan de certezas prestadas, de métodos infalibles, de
guías que prometen llevarnos al destino sin desvíos ni contratiempos. Pero
cuando el día se desliza incierto, cuando el camino se quiebra en direcciones
inesperadas, cuando la vida se sacude impredecible, sentimos el vacío de lo que
nunca fue nuestro. Nos damos cuenta de que esas respuestas, esas fórmulas, esas
estrategias diseñadas para todos no encajan en la singularidad de nuestra
existencia. Porque no hay receta para ser, ni manual para existir.
No hay magia en los atajos, solo la ilusión de un camino más
corto que nos roba la oportunidad de descubrirnos. Porque somos lo que
aprendemos en la travesía, no lo que nos entregan resuelto. Cada error nos hace
crecer, cada duda nos obliga a mirar más allá, cada fracaso nos ofrece una
lección que ningún consejo prefabricado podría enseñarnos.
Los tips sirven de faro, pero el mar sigue siendo nuestro.
Cada ola que nos golpea, cada viento que nos empuja, cada naufragio que nos
despoja de certezas y cada hallazgo que nos devuelve la esperanza, todo eso nos
pertenece. Cada decisión que tomamos, cada miedo que enfrentamos, cada
obstáculo que superamos es parte de nuestra historia, de nuestra identidad, de
aquello que nos hace únicos.
Por eso te invito a descubrir tus tips, los que brotaron en
tu historia, los que tejiste con los años, con cada caída, con cada intento,
con cada sueño cumplido y cada anhelo postergado. Esos que están en la piel de tu propio camino,
en las cicatrices que te recuerdan que viviste, que sentiste, que luchaste.
Porque al final, los únicos tips infalibles son los que vos creas. Los que nacen de tu experiencia, de tu intuición, de tu valentía para seguir avanzando.
Son los que te llevan a construir cada día una mejor versión de vos mismo, porque
aprendiste a escuchar la voz más importante de todas: la tuya.
Andrea Calvete