INVICTUS

Salir invicto de las batallas peleadas no es tarea menor, algunos caen y mueren, otros se rinden en medio del camino, y algunos pocos salen invictos fortalecidos por las olas que han azotado y las espinas clavadas, aún en los lugares más dolorosos.

Quien logra cicatrizar sus heridas y pararse para continuar, es porque decide poner un rumbo a su vida y no está dispuesto a darse por vencido. Invictus es seguir con aire victorioso, como si impulso nos animara a mantenernos en pie, porque “somos amos de nuestros destinos y capitanes de nuestras almas”

Quizás hayas pasado muchas batallas o estés transitando una, cuando esto sucede nos rodean los peores aliados como: el enojo, la tristeza o desazón. Y entonces no podemos permitir que ganen la pulseada.

Quien logra dominar sus temores está a punto de continuar, de seguir con alma renovada, porque superarse a uno mismo es uno de los desafíos más grandes que nos propone la vida, y algunas veces no somos capaces de entenderlo a tiempo.

Salir invicto de las batallas peleadas no es tarea menor, algunos caen y mueren, otros se rinden en medio del camino, y algunos pocos salen invictos fortalecidos con aire renovado y la experiencia como un aura mágica capaz de proteger con su halo de triunfo.

Inspirado en el poema Invictus de William Ernest Henley

Andrea Calvete