AMANECE
Amanece en paz, el murmullo lento envuelve a la mañana que espera. En la copa de los árboles el sol se cuela con su belleza pura y brillante, mientras el trinar perfumado de los pájaros es la suave melodía que acuna al inicio del día.
¡Cuánta paz en la naturaleza, cuánto misterio escondido! Es como si el aire nos hablase e invitara a perdernos en un momento perfecto. Me pierdo, ¿por qué no?, en el disfrute tranquilo de este momento de paz, soy con él, me interno en las notas silvestres de la vida, en los aromas primaverales que seducen con su encanto irresistible.
Hago una pausa, me cebo un mate, lo saboreo, me acompaña con ese amargo suave. No me pide nada a cambio, solo que absorba su combinación perfecta y lo mantenga unos instantes en mi paladar para después integrarlo a mi ser con gratitud. En paz se agradece, se disfruta de lo más simple y hermoso que puede ser un amanecer.
Amanece en paz, el murmullo lento envuelve a la mañana que espera. En la copa de los árboles el sol se cuela con su belleza pura y brillante, mientras el trinar perfumado de los pájaros es la suave melodía que acuna un nuevo día, sonriente con las pupilas brillantes y el semblante sereno. La brisa augura una bella jornada.
Andrea Calvete