EL DEPORTE ES SALUD
La conjunción de la mente, el cuerpo y el alma, es la que da lugar al ser, por lo tanto, para lograr una armonía no debemos descuidarla. En la actualidad, este tríptico sufre cortocircuitos importantes ocasionados por las múltiples situaciones que conlleva el vivir bajo un permanente estrés.
Es así que el impacto de nuestros pensamientos y estados anímicos tienen una gran correlación con nuestro sistema físico. De este modo, el deporte es un importante nexo que permite armonizar al hombre en su totalidad.
Y quienes realizan actividad física en forma regular, previenen enfermedades, a la vez que desarrollan y rehabilitan su salud.
El hecho de practicar un deporte también incide en el carácter de las personas, en la toma de decisiones, es decir en el diario vivir, optimizando sus días.
Y el deporte ampara a todas las razas, sexos, edades, condiciones sociales, religiones, creencias, costumbres, pensamientos ideológicos, políticos y filosóficos, cobijando a todos por igual.
Las relaciones vinculares que se desarrollan a partir del deporte, favorecen la integración cultural, social y deportiva, estimulando el respeto hacia cada uno de sus integrantes, donde la tolerancia y la libertad juegan un rol preponderante, y permiten trascender los obstáculos y barreras.
En el fondo todas las actividades deportivas, encierran y promueven los valores humanos por los que siempre el hombre lucha y se desespera. Y por ello también se puede tomar como una filosofía de vida, en la que el ejercicio se realiza en forma disciplinada y constante, en pos de sentirnos mejor.
Si bien todos los ejercicios aeróbicos permiten corregir y prevenir enfermedades como la obesidad, cardiopatías o colesterol, también es cierto que contribuyen a disminuir los trastornos como la ansiedad, estrés y depresiones.
Asimismo, el sedentarismo afecta a muchísimas personas, por lo tanto, quien decide realizar algún tipo de ejercicio en forma asidua y controlada, entonces comienza a batallar contra este flagelo tan arraigado.
Por otra parte, se ha comprobado que la actividad física revitaliza no sólo nuestro estado físico, sino también nuestro estado anímico. De este modo, quien realiza algún deporte, favorece el proceso de cognición, al mismo tiempo que el rendimiento académico.
A través de estudios realizados en la Universidad de Illions, se comprobó empíricamente, que a mayor actividad aeróbica, menor degeneración neuronal. Por lo tanto, se da una la relación directa entre el ejercicio y los procesos cognitivos.
Entre sus beneficios, la actividad física permite mejorar la salud física y mental. Desde el punto de vista psicológico, la participación en el deporte favorece la autoestima y la imagen positiva de uno mismo, disminuyendo así las conductas autodestructivas y antisociales.
Según el Instituto Nacional Americano de la salud mental el ejercicio disminuye la ansiedad, la depresión moderada, a la vez que mejora el bienestar emocional y aumenta la energía.
El estrés es un trastorno muy frecuente que padecen muchas personas, dado el ritmo de vida y de trabajo, por lo tanto, el poder realizar algún tipo de actividad física les permite mejorar su calidad de vida.
Y el correr o participar en maratones cada vez es más frecuente y habitual. Es muy común ver eventos de esta índole, donde además del ejercicio en sí, se ve un desafío a nivel psicosocial muy importante, en el que las personas promueven metas en intereses personales, a la vez que sociabilizan con otros individuos y conocen de cerca lo que significa competir más allá de los posibles resultados.
En las competencias se produce un proceso de enseñanza-aprendizaje en equipo, donde el cumplimiento y el respeto a las reglas son parte de la actividad, promoviendo la dinámica de grupo, la tolerancia y la integración social.
Además el deporte promueve individuos activos, dispuestos a enfrentar la vida con mayor optimismo, proclives a sociabilizar con menores dificultades.
Y para poder llevar adelante una vida positiva, cargados de energía dinamismo y alegría, nuestro cuerpo a través de diferentes hormonas y neurotransmisores -adrenalina, serotonina y endorfinas- es responsable de nuestras emociones, por lo tanto, es importante emprender actividades en las que segreguemos estas sustancias, y el ejercicio es una actividad que las despierta y libera.
A su vez, el realizar en forma organizada un deporte, es una forma de promover la perseverancia, la organización y la lucha por las metas, donde el respeto, y el sentido de la responsabilidad son pilares básicos.
En su obra, Ortega y Gasset defiende la idea de que la filosofía es “la ciencia de los deportistas”. Afirma que ambas son “un ejercicio placentero” y, además, que “todas las grandes obras humanas tienen una dimensión deportiva” ya que “del deporte conservan el limpio humor y el rigoroso cuidado”.
Finalmente, quien realiza actividad física en forma asidua, logra mejorar su calidad de vida, y permite que esa relación, cuerpo mente y alma pueda funcionar en forma más armónica. Por todas las razones antes mencionadas, el deporte es salud.